domingo, 14 de septiembre de 2008

La Casita de los Gigantes


En esta casita, se reúnen todos los lunes un grupo de diez pequeños gigantes, con el fin de distribuirse diversas tareas invisibles, que la comunidad nunca nota, ni reconoce. Pero es que la labor desinteresada no busca un aplauso, sino que se convierte en una vocación.
A pesar del marcado individualismo, de la total indiferencia que existe en la población bogotana, se encuentran unas pocas personas que reconocen que el bien común es superior al interés individual, personas que pretenden inyectar un poquito de sentido de pertenencia por el barrio.
Son muy pocas, no llegan a diez, pero conforman un grupo humano destacado que ya ha desarrollado importantes avances en la vida normal de Pasadena.
Personas que sacrifican parte muy importante de su tiempo disponible para realizar labores en procura de mejorar la calidad de vida de los vecinos y residentes en Pasadena.
Celosos guardianes del espacio público, de la seguridad, de la cultura ciudadana, del mejoramiento de las zonas verdes de los parques.
Todos los lunes a las seis y treinta de la tarde se siguen reuniendo, analizando las necesidades del barrio, invitando a las diversas autoridades del Distrito Capital para que en directo se formen una idea de lo que en Pasadena ocurre. Durante el resto de la semana se dirigen hacia las diferentes dependencias oficiales, tocando puertas, haciendo largas antesalas, presentando memoriales, peticiones, escribiendo notas a los medios de comunicación pidiendo su colaboración y divulgación.
En esta casita se forman los gigantes silenciosos servidores de la comunidad.
Ricardo, Conrado, Amparo, Ofelia, Luz Marina, Tito, Alvaro, Fernando, Alcira, Emilio

1 comentario:

mary simpson vargas dijo...

Emilio, ya veo porque te consideras "altamente peligroso para gobernantes, dignatarios .. etc".
La cajita de sorpresas eres tu. Eres un ciudadano ejemplar ... señal de una muy buena educación.